viernes, 19 de octubre de 2012

“El gasto militar previsto para el año 2013 es de 16.492 millones de euros, más del doble de lo que el Gobierno ha dicho” Tomado de PeriodismoHumano


Centro de Estudios para la Paz Delàs de Justìcia i Pau (@Centredelas)

La deuda en gasto militar del Ministerio de Defensa amenaza con engrosar el déficit público.

La deuda por los Programas Especiales de Armamentos (PEAS) alcanza los 32.000 millones de € y los créditos entregados a las empresas militares ascienden a 15.559 millones de euros.

La economía del Ministerio de Defensa es insostenible y puede derivar en una situación de suspensión de pagos técnica y en un endeudamiento que podría convertirse en déficit público en 2013. El principal causante de la difícil situación económica del ministerio es el gasto militar, concretamente los Programas Especiales de Armamentos (PEAS), cuya deuda asciende a 32.000 millones de €. Estos programas de armas tienen escasa utilidad estratégica para las necesidades reales de defensa y la mayoría de ellos acabarán su vida útil sin haber entra nunca en combate.

El informe Verdades y mentiras en el presupuesto militar español de 2013 publicado por el Centro de Estudios para la Paz JM Delàs recoge los principales datos de la realidad del presupuesto militar español con el objetivo de mostrar cómo el Ministerio de Defensa esconde cada año en partidas de otros ministerios más de la mitad del presupuesto militar. En el documento se analizan la incidencia del gasto militar sobre el montante final de la deuda pública, su efecto negativo sobre el gasto social y el preocupante caso de los PEAS y el crédito extraordinario concedido para cubrir su escandalosa deuda. El Centro Delàs también incluye en el informe el análisis detallado del presupuesto de defensa de 2013 y lo compara con el 2012, haciendo especial hincapié en comprobar si los recortes del Gobierno en esta área son definitivos o si las cifras sufrirán una modificación a mitad del ejercicio para aumentar la partida presupuestaria.

En lo que se refiere a gasto militar -16.492 millones de € previstos en 2013-, el informe destaca que éste entorpece el crecimiento de la economía productiva. Los nuevos riesgos y amenazas de los países industrializados ya no pueden combatirse con el armamento de una economía de defensa y por ello el modelo debe virar y poner a las personas, y no a los estados, como sujeto central de la seguridad. Países como Alemania y Francia, entre otros, ya han diseñado programas de reducción de efectivos y plantillas militares. España puede también reducir el endeudamiento y el déficit público apostando por la seguridad común a escala regional y por las políticas de desarrollo humano en educación, salud, derechos humanos y de disminución de las desigualdades económicas.

martes, 2 de octubre de 2012

Irregularidades en un contrato de Defensa en Chinchilla

El Tribunal de Cuentas ha detecatado irregularidades en la adjudicación de un contrato millonario de obras que se realizó en el año 2010 en el campo de maniobras militares de San Gregorio, en Zaragoza, así como con otro contrato similar en el campo de maniobras de Chinchilla, en Albacete.

En este caso, el Ministerio de Defensa abonó a Tragsa 430.000 euros (71 millones de las antiguas pesetas) por obras realizadas allí.

El contrato de Zaragoza fue adjudicado por el Ministerio de Defensa -que en ese momento dirigía la socialista Carmen Chacón- a la sociedad pública Tragsa (Transformación Agraria S.A.) de forma directa, en vez de sacarlo a concurso. El importe de las obras ascendió a 1.355.000 euros y consistió en la construcción de un polígono de combate en este campo de maniobras, según reveló ABC de Aragón el pasado domingo en su edición impresa.

El Tribunal de Cuentas considera que el contrato fue irregular porque se contravino un precepto elemental: que la encomienda de gestión realizada a una empresa pública se haga para servicios u obras que encajen en las funciones que le son propias a la empresa pública en cuestión. Y no era el caso. Como subraya el órgano fiscalizador, los estatutos de Tragsa definen con claridad que su ámbito de actuación son «obras, trabajos y prestación de servicios agrícolas, ganaderos, forestales, de desarrollo rural, de conservación y protección del medio natural y medioambiental, de agricultura y de pesca, así como los necesarios para el mejor uso y gestión de los recursos naturales». Nada que ver con construcción de campos militares de maniobras.

Informe desfavorable

En 2010, cuando se tramitó el encargo a esta sociedad pública (controlada por el Ministerio de Medio Ambiente) de construir un campo de combate en Zaragoza, incluso desde los servicios jurídicos del Cuartel General del Ejército de Tierra se emitió un informe desfavorable a dicho contrato. Sin embargo, se obvió dicho informe y se formalizó el contrato sin sacarlo a concurso y someter las obras a la «concurrencia competitiva».

El Centro Nacional de Adiestramiento del Ejército (CENAD) de «San Gregorio» es el principal campo de maniobras del ejército español. Ocupa 34.000 hectáreas de superficie y está situado en las afueras de Zaragoza. Sus terrenos abarcan parajes de varios términos municipales, incluido el de la capital aragonesa.

En él se realizan pruebas de armamento y material de Defensa, y suele ser utilizado también en maniobras conjuntas con fuerzas armadas de países aliados, lo mismo que ocurre en el campo de maniobras de Chinchilla.